Cuando me visto
de luna
mi noche larga
y oscura
se llena
de suave luz...
Y me recuesto
en la arena,
a contemplar
el mar de estrellas
que iluminan mi sendero circular.
Ilumino veredas
sin prisa,
respirando la suave
brisa
de mi caminar, que lento
se va acercando
certero
a mi permanente
hogar.
