¡Oda de amores, frío de otoño!…
La noche escribe un verso
a su luna enamorada.
Todas las noches sale
a mostrar su rostro hermoso
y sobre el vaivén de las olas
cabalga en la blanca espuma
hasta llegar a la arena
y allí se muestra desnuda
con esa piel de plata pura
y sus lunares de locura.
“¡Qué no sepa
que escondido
entre la bruma he admirado
su reflejo en las aguas,
cuando bajaba a besarse
en furtivas escapadas!”.
“¡Qué no sepa
que en mis sueños
también deseé besarla
y entregárme en sus brazos
de olas, espuma y plata!”
